El secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, presentó este jueves frente a el Consejo de Estabilidad de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
La iniciativa del mandatario de su territorio, Andrés Manuel López Obrador, donde reitera el denominado al bienestar en el planeta a raíz del problema en Ucrania.
Y precisó que la solución del problema necesita la utilización de la vía diplomática, con una expresa voluntad política de las piezas y compromiso de la sociedad universal.
Señaló que el Gobierno mexicano recomienda instituir un Comité para el Diálogo y el bienestar en Ucrania, que fortalezca el papel que practica como mediador el secretario general de las naciones unidas, António Guterres.
Podría disponer de la colaboración de todos los jefes de Estado y de Régimen que deseen ser parte, y donde se encuentren presentes además como miembros permanentes personalidades populares el primer ministro de la India, Narendra Modi, o el Papa Francisco.
“El objetivo es producir nuevos mecanismos para el diálogo y producir espacios complementarios para la intervención, que fomenten la confianza, disminuyan las tensiones y abran el camino hacia una tranquilidad duradera”, detalló.
Asimismo, Ebrard señaló que su territorio continuará llevando a cabo las consultas elementales para contribuir como actor imparcial, y respaldar las mediaciones que ejecuta las naciones unidas en aras de encontrar una solución persistente del problema.
Ebrard señaló que los causantes de los crímenes que se hayan cometido en Ucrania tienen que ser llevados frente a la Corte Penal Mundial, enseñó inquietud por el peligro nuclear derivado de los enfrentamientos cerca de la central Zaporiyia, y reconoció el costo de las iniciativas del Corredor de Granos del Océano Negro.
El representante gubernamental mexicano ponderó el costo de las mediaciones del secretario general de las naciones unidas y del mandatario de Türkiye, Recep Tayyip Ergodan, a la vez que ratificó que es hora de actuar y comprometerse con el bienestar.
Un conjunto formado por Türkiye, Indonesia, Corea del Sur, Australia y México, que acogieron la idea del proyecto de Tranquilidad.