El duelo de Britney Spears con su padre por su tutela no es el único que la cantante ha tenido que batir dentro de su círculo familiar. Fue a mediados de octubre cuando la estrella del pop criticó abiertamente el próximo libro que publicará su hermana, Jamie Lynn Spears, en enero de 2022.
La pequeña de los Spears decidió llamar a su obra I must confess… (que se traduce como “Debo confesar…”), un nombre que hace referencia a una de las canciones más conocidas de Britney, Baby One More Time, y que posteriormente se vio obligada a cambiar por las numerosas críticas recibidas en redes sociales y por su propia hermana, que le acusó públicamente de no apoyar el movimiento Free Britney.
Unas críticas que han afectado negativamente a la fama de este futuro libro, llegando a oídos de la ONG a la que Spears quería donar los fondos recaudados por su venta.
La organización sin ánimo de lucro This Is My Brave, dedicada a la salud mental, ha rechazado la oferta de Jamie Lynn Spears de hacerles una donación con los beneficios que obtenga de las ventas de sus memorias. La ONG ha respondido a través de una publicación en Instagram a las reacciones negativas que han suscitado: “Os hemos escuchado. Estamos tomando medidas. Lamentamos profundamente haber ofendido a alguien. Hemos declinado la donación del próximo libro de Jamie Lynn Spears”.
Junto a la publicación, han incluido un texto explicativo que ha sido aplaudido por multitud de seguidores que apoyan el movimiento Free Britney: “Recientemente se recomendó que This Is My Brave fuera una organización beneficiaria de las ganancias del próximo libro de Jamie Lynn Spears. Hemos tomado la decisión de rechazar la oferta de recibir los beneficios de las ventas del libro”.