A partir de enero de 2022, las personas físicas con actividad empresarial, emprendedores y pequeños negocios, cuyos ingresos no rebasen los 3,5 millones de pesos anuales, pagarán una tasa del Impuesto Sobre la Renta (ISR) de entre 1% y el 2,5% dependiendo de sus ingresos sin derecho a deducciones de gastos.