El expresidente de Estados Unidos Donald Trump, fue demandado por siete policías del Capitolio, junto a más de una decena de presuntos participantes en el asalto del 6 de enero al considerarlos responsables de las agresiones sufridas.
El grupo argumenta que Trump es responsables de que los siete agentes, miembros de la Policía del Capitolio, fueran «agredidos violentamente, escupidos, gaseados con sustancias lacrimógenos y espray para osos, sometidos a insultos raciales y puestos en una posición en la que temieron por su vida».
En la demanda, los siete policías han apuntado a Trump como culpable de los hechos por haber incitado a la multitud a asaltar el Capitolio con denuncias infundadas de fraude sobre las elecciones presidenciales en las que venció el ahora presidente, Joe Biden. Así, han lamentado que el exmandatario y otros demandados «alentaron y apoyaron actos de violencia, sabiendo muy bien que entre sus partidarios había grupos e individuos como los Proud Boys, que habían demostrado su propensión a usar la violencia contra los críticos». Igualmente, se han referido al «racismo y la supremacía blanca» como característica y motor en las acciones de los participantes en el ataque, que se enfocaron en las «falsas afirmaciones de fraude electoral en ciudades y estados con importantes poblaciones negras».