El fenómeno podría traer fuertes vientos y precipitaciones proyectadas para la región de Kanto-Koshin, según consigna Kyodo News. Y aunque los últimos reportes hablan de “cierta pérdida de intensidad”, hay precaución. El último tifón que impactó sobre un evento deportivo fue el Hagibis, en 2019. Fue la peor tormenta en Japón en seis décadas y dejó destrozos y un triste saldo de más de 70 muertos. Por entonces, se suspendieron partidos del Mundial de rugby y fueron reprogramadas las pruebas de clasificación de la Fórmula 1.