Cartelera película Cinebox: ‘Gru 4. Mi villano favorito’, nueva dosis de vitamina minion, La nueva entrega del universo Gru
La nueva entrega del universo Gru, que sigue siendo una burbuja explosiva y amarilla de los robaescenas llamados minions, se coloca en la comedia de situación familiar en la que habrá nuevos y viejos enemigos.
Encapsulada en una burbuja de color amarillo, el universo Gru parece retroalimentarse de sí mismo en una suerte de endogamia, divertida, de la cual la franquicia no ha dudado en reírse. En esta cuarta entrada en el interior de un cartoon de la añorada DePatie-Freleng, con a un lado el tempo repetitivo de una comedia de situación, y al otro las risas paródicas a lo ‘Teen Titans Go!’, los villanos del pasado se van sucediendo en sus apariciones, como si se tratara de los fantasmas dickensianos, esta vez prestos a reafirmar a Gru (atrapado en la asumida paternidad no buscada, y en un matrimonio que pasa del toma y daca Emma Peel & John Steed de la catódica ‘Los Vengadores’, al aburrimiento conyugal) en su abandono de la villanía, incluso revelada al mundo en un giro no novedoso, pero sí efectivo. En su abandono de la delirante y deliciosa megalomanía de su primera aparición.
‘Gru 4. Mi villano favorito’ es, asombrosamente, una tragicomedia que revolotea alrededor de la pitopausia (madres y padres: NO es necesario explicárselo a la chavalería). Una no aventura crepuscular (para el caricaturesco protagonista con la voz, en la versión original, de Steve Carell, y entre nosotros, del gran Florentino Fernández) que sospechosamente recuerda argumentalmente a la última estrenada de la saga ‘Kung Fu Panda’ (vaya, de nuevo Flo), a ‘Rocky V’ con esa aprendiz de villana adolescente cuya sed de maldad (la incruenta y chispeantemente chistosa de la casa) tomará a Gru como modelo paternal a imitar, superar y eliminar. Gru también sentirá por ella ese sentimiento al ver en ella todo lo que su domesticación se llevó por delante.
Por supuesto que la película ni siquiera se atreve a profundizar en estas cuestiones, acaso porque teme ponerse psicoanalítica como la Pixar; acaso porque no le hace falta y si uno está atento a los detalles (madres y padres: revisemos con la chavalería el film en unos años), como a que el paso del tiempo, importante en la trama (los traumas no superados de Gru en la academia villanil, parte que seguro alegrarán la tarde, a él y a sus hijos, al Carlo Padial de ‘Algo muy gordo’), desaparezca en las hijas adoptivas de Gru, aparentemente atrapadas en una infancia o preadolescencia eternas, quizás porque de esa manera siguen atando al Gru súper malvado a una vida familiar de plácido tedio.
‘Gru 4. Mi villano favorito’ juega todo su metraje con ese contraste de un mundo de slapstick y de acción risueña, y de un personaje central que ha perdido su lugar en ese universo. Junto a él, antiguas némesis y nuevos contrincantes, se entregan al deus ex machina del gag loco (y del universalmente exitoso del ‘caca, culo, pedo y pis’), mientras Gru parece el Seth Rogen de ‘Malditos vecinos’. O los Visión y Bruja Escarlata de la homónima teleserie marvelita. Por cierto, la película no solo echa mano del recurso de la comedia de situación familiar (con unos cuantos y bienvenidos zascas a las de temática fantástica y superheroica que contaminan principalmente el Canal Disney) en un nivel entendible y reconocible por todos los espectadores, también regalan un bonus extra a los más veteranos en las figuras de la pareja de vecinos que se las han de ver con el apocalipsis despiporrante minion, calcados a los estirados y británicos que veían su existencia desquiciada por los George y Mildred de ‘Los Roper’.
‘Gru 4. Mi villano favorito’ sigue siendo un festival de colores y de abrazos a la animación pop de la UPA y a la de la mencionada al comienzo de estas líneas DePatie-Freleng (‘La Pantera rosa’; ‘El Inspector’… con genio del Mal de macarrónico acento francés), y sigue siendo burbuja explosiva y amarilla de esos robaescenas natos llamados los minions. Con menos protagonismo en minutos esta ocasión, el torbellino minion aprovecha al máximo sus momentos de gloria, birlando la película con su gloriosa parodia Marvel (los megaminions hijos de la risa de la Patrulla X o de Los Cuatro Fantásticos), sus gags visuales dignos de Blake Edwards (el minion Cíclope desencadenando el desorden cómico), y su verborrea ininteligible, la cual, visto ya este cuarteto cinematográfico con sus fugas minion en solitario, uno descubre que no es más (ni más ni menos) que el Chaplin inventando el lenguaje para reírse del cine sonoro en ‘Tiempos modernos’. Tal vez no recordemos en un tiempo lo que fue de Gru, o por qué llegó a ser nuestro villano favorito, pero jamás olvidaremos a sus oompa loompa limón.
Lo mejor: Stan Lee mutado en humor amarillo.
Lo peor: demasiado desfile de personajes para a la postre no aportar demasiado.
Dirección: Chris Renaud, Patrick Delage País: Estados Unidos Año: 2024 Fecha de estreno: 3-7-2024 Género: Animación Guion: Ken Daurio, Mike White Duración: 95 min.
Sinopsis: Gru, Lucy, Margo, Edith y Agnes dan la bienvenida a un nuevo miembro de la familia, Gru Jr., que se empeña en atormentar a su padre. Gru tiene una nueva némesis, Maxime Le Mal, y su novia Valentina, y la familia se ve obligada a huir.