Ryan Ward y Su Noche Histórica El Bate de Fuego que Prende a Dodgers
Ryan Ward y Su Noche Histórica El Bate de Fuego que Prende a Dodgers, En el calor de la noche nevadense, bajo las luces del Vegas Ballpark
En el calor de la noche nevadense, bajo las luces del Las Vegas Ballpark , uno de los prospectos más prometedores de los Dodgers escribió su nombre con fuego en la historia reciente del béisbol de ligas menores. Ryan Ward , el cañonero de los Oklahoma City Comets , se convirtió en protagonista absoluto al firmar una actuación antológica:
- 5-5 en el plato.
- 3 jonrones .
- 6 carreras impulsadas .
- Y un récord histórico: el nuevo líder en carreras remolcadas en la historia de Oklahoma City en la era Bricktown.
No fue solo un buen juego. Fue una obra maestra sobre el diamante. Un parteaguas para quien ya es visto como uno de los mayores talentos ofensivos del sistema angelino.
Ward, El Líder de la Noche
Desde la primera entrada, Ward dio señales de lo que vendría: un sencillo productor que puso el primer punto en el marcador. Pero eso era apenas el prólogo.
En la tercera, con tres anotaciones ya en el tablero, conectó un jonrón de dos carreras que sacudió las tribunas. Luego, en la séptima y nuevamente en la novena, mandó la pelota al otro lado de las gradas, consolidando su noche mágica y llevando a los Comets a una victoria contundente por 9-3 ante los Aviators .
Cada swing suyo no solo movía el marcador… movía la historia.
Un Récord que Queda Pequeño
Con ese sencillo en la primera entrada, Ryan Ward rompió un empate histórico: superó a Jason Botts y se convirtió en el máximo impulsador en la historia de los Oklahoma City Comets en la era Bricktown (desde 1998), llegando a 236 RBI en su carrera con el equipo.
Pero eso no fue lo único que dejó marca.
Se convirtió en el primer jugador de OKC con cinco hits en un partido en 2025 .
Y también en el tercer jugador de la PCL esta temporada en conectar tres cuadrangulares en un mismo juego , uniéndose a una lista selecta que ha hecho temblar al circuito desde el domingo.
El Último Gran Show de Tres Actos
Fue el décimotercer juego de tres jonrones o más en la historia de los Comets desde 1998. Y el primero desde hace exactamente un año, cuando Trey Sweeney hizo lo propio en Albuquerque.
Pero Ward no solo imitó. Superó. Porque además de volar la barda, se fue de 7-7 en turnos consecutivos con hit , incluyendo los siete últimos del jueves y viernes. Un toletero en llamas, con el alma de un gigante y el swing de un dios.
La Era de los Cañones Jóvenes
Mientras Shohei Ohtani y Aaron Judge disputan duelos épicos en el nivel más alto, en las ligas menores también hay fuego. Y mucho.
Los Dodgers tienen ahora una nueva estrella brillando en sus filas menores. No solo por su poder, sino por su consistencia. Con Ben Casparius destacando en el bullpen y Ward explotando con el madero, el futuro azul sigue llenándose de color.
Y si algo queda claro tras esta noche: los jóvenes de los Dodgers no están aquí para aprender… están aquí para enseñar .
Epílogo: Entre el Presente Menor y el Futuro Mayor
Ryan Ward no solo jugó bien. Jugó como si cada lanzamiento fuera suyo. Como si cada bola fuera suya para dominar. Y aunque aún falta para que suene su nombre entre los grandes, ya hay miles en LA que lo murmuran con esperanza.
Porque cuando un hombre conecta tres vuelacercas en un solo partido, no está jugando béisbol. Está escribiendo destino. Y si hay algo claro, es que este no será su última noche histórica .
Solo resta preguntarse… ¿cuándo veremos ese swing en el Dodger Stadium?
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