Dodgers: Mookie Betts y su conexión con los Red Sox, Años después de su controversial salida de los Boston Red Sox
Años después de su controversial salida de los Boston Red Sox, Mookie Betts, ahora estrella de los Los Angeles Dodgers, admite que sigue disfrutando ver los juegos de su ex equipo. Durante su aparición en el podcast All the Smoke, Betts dejó en claro que su aprecio por los Medias Rojas no ha disminuido, especialmente por la relación que aún mantiene con el manager Alex Cora.
“Disfruto viendo los juegos de los Red Sox… por Cora”, comentó Betts, dejando en claro que el respeto y la admiración por su ex manager son un motivo importante para seguir pendiente del equipo. La conexión con Cora parece trascender lo deportivo, siendo una muestra de la influencia que el estratega ha tenido en su carrera.
A pesar de las especulaciones en torno a su salida de Boston, Betts enfatizó que no guarda rencor hacia la organización ni sus fanáticos. “La gente piensa que lo odio o que no quería estar allí, pero no es así. Fue un tema de negocios, y eso no afecta mi relación personal con Boston”, aseguró.
En febrero de 2020, los Red Sox tomaron la difícil decisión de canjear a Betts a los Dodgers, citando restricciones financieras y su posible partida en la agencia libre. Aunque se rumoreó que Boston le ofreció una extensión de $300 millones por 10 años, Betts firmó meses después un contrato de 12 años y $365 millones con los Dodgers, consolidando su lugar en Los Ángeles.
Betts explicó que tuvo que separar sus emociones del aspecto comercial al tomar esa decisión: “Los negocios son los negocios. No se pueden mezclar con lo personal. Para obtener el mejor resultado para mi familia, tuve que ocuparme de los negocios”.
A pesar de su nuevo hogar en Los Ángeles, Betts sigue viendo su paso por Boston con cariño. “Me encantó mi tiempo allí. Todavía hablo con personas de la oficina principal y, por supuesto, con AC (Cora)”, mencionó. Sin embargo, también destacó que ser un Dodger ha sido una de las mejores decisiones de su vida, tanto profesional como personalmente.
El hecho de que Betts siga viendo los juegos de los Red Sox resalta su vínculo emocional con la franquicia, algo que no siempre es común en jugadores que han dejado sus antiguos equipos en circunstancias similares. Su admiración por Cora, su afecto por la ciudad y su aprecio por los fanáticos son testimonio de que su relación con Boston va más allá de los contratos y negociaciones.
Aunque su capítulo en los Red Sox terminó hace años, para Mookie Betts, Boston sigue siendo una parte especial de su vida y su carrera.