Cartelera película Cinebox: 5 Datos sobre Flow Un Viaje Espiritual, Flow sigue a un pequeño gato negro, quien es arrebatado de su hogar
Después de su innovadora y pequeña primera cinta: “Away”, el director Gints Zilbalodis, vuelve con una propuesta más grande, más sólida y estremecedora. Flow sigue a un pequeño gato negro, quien es arrebatado de su hogar, debido a una inexplicable inundación. Ahora, junto con otros animales, deberán enfrentar un viaje lleno de aprendizaje y despedidas. Una experiencia casi espiritual, llena de simbolismos y sensaciones.
El estilo de animación es bello y texturizado, se diferencia del resto, gracias a trazos fuertes, formas imperfectas y paisajes que parecen pintados con acuarela.
El uso de la cámara digital es sencillamente impresionante, al igual que su título, va fluyendo a través de los bosques, montañas y océanos, con planos secuencia, que te mantienen inmerso, te hacen flotar durante toda la travesía, además de hacerte sentir a cada paso, que este mundo se hace más y más grande.
La ausencia de diálogos nos permite prestar mayor atención a las reacciones, movimientos y gestos de cada uno de los animales, parecen tan auténticos y naturales que generas una casi inmediata empatía y conexión, por lo que nos preocupamos por ellos en cada interacción, vínculo y peligro al que se enfrentan.
La música, creada por el mismo director, es un deleite. Toma inspiración de Away y la magnifica, produciendo emociones conmovedoras en los momentos precisos, cobijándonos en una atmósfera de belleza y magnitud, el agua nos aísla, las montañas nos olvidan, la soledad nos cubre, somos diminutos, somos insignificantes… Pero, el sol nos da esperanza, las ballenas nos guían y las señales permiten que nos hundamos hasta el fondo.
Su sencillez, nos hace buscar respuestas, nos crea la necesidad de ver más, de sentir más, generando que cada persona encuentre en este viaje, un significado distinto, importante y significativo para su vida.
La historia particularmente lineal, puede no resultar tan atractiva para toda la audiencia, por lo que, quien no haya quedado inmerso en este mundo desde el comienzo, puede llegar a desconectarse en el camino, que considero, sería una lástima.
El tercer acto, llega a perder impacto, debido a que carece de un clímax que verdaderamente ponga aprueba la supervivencia de nuestros personajes.
Desde las connotaciones religiosas, como el Arca de Noé, hasta animales que son guías espirituales, Flow deja en cada persona mucho más de lo que uno pueda expresar con palabras, es por ello que me refiero a ella más como un viaje sensorial y espiritual.