Carlos Alcaraz y Novak Djokovic se medirán este domingo, 16 de julio, a partir de las 15:00 horario peninsular en Wimbledon .
Los fanáticos del tenis están con los pelos de punta, y es que ya se sabe que Carlos Alcaraz y Novak Djokovic disputarán la final de Wimbledon, el español llega a la final tras vencer en la semifinal a Medvedev en tres sets y buscará su primer título sobre la hierba de Londres. Mientras que, el serbio tratará de revalidar la corona y encadenar su quinto triunfo consecutivo en el All England Club tras superar al italiano Sinner, por lo que acá te contamos algunos detalles de lo que será Alcaraz vs Djokovic en la gran final.
La conexión del antillano llegó en la parte baja del quinto episodio, cuando enfrentó al relevista Jake Bird y encontró a su compañero James Outman en la tercera.
35 finales de Grand Slam, nueve en Wimbledon y puede que el octavo título que lo iguale a Roger Federer. Novak Djokovic doblegó este viernes con suficiencia al novato Jannik Sinner (6-3, 6-4 y 7-6 (4)) y disputará este domingo la final de Wimbledon, en la que puede cambiar el 23 de sus zapatillas por el vigésimo cuarto Grand Slam de su carrera deportiva.
Sin espacio para sorpresas como la del año pasado, cuando el italiano se puso 2-0 contra él en cuartos de final y le pegó el gran susto del torneo, Djokovic hizo su mejor partido de esta edición para imponerse a un Sinner que, aunque parezca mentira por el resultado, hizo una gran actuación y si se fue de vacío fue porque no es el mejor de la historia, logro que su rival sí posee.
Djokovic fue infinitamente mejor que el transalpino en cada situación de tensión. En las pelotas de rotura, en los iguales, en los puntos decisivos a Sinner se le atragantó la pelota y la situación, mientras que el serbio disfrutaba encontrando esquinas y estirándose de un lado a otro.
El primer juego del partido, en el que Sinner tuvo dos bolas de ‘break’, fue a su vez espejismo y reflejo de lo que ocurriría más tarde. Djokovic salvó ambas oportunidades y rompió el saque de Sinner un juego después. Podía ser el signo de un partido igualado, pero Djokovic fue poco a poco ganando golpes morales.
Con 3-1, desactivó otra pelota de rotura, con 5-2 cayo al suelo tras una dejada del italiano y al sacar para set se colocó 0-15 y lo levantó con tres saques directos seguidos.
Cuando Djokovic se adecuaba a la norma y se quedaba desde el fondo jugando al ping pong, Sinner no tenía nada que hacer. Solo cuando el serbio experimentaba, con dejadas o subidas a la red, se emborronaba su exhibición.
En el tercer set, el más disputado, Sinner se puso con 15-40 a favor y dos puntos de set. En el primero de ellos, Djokovic falló el primer servicio y se escuchó un cántico a favor del italiano. El serbio se dirigió al público, aplaudió y levantó un pulgar con gesto despectivo. Procedió a ganar los cuatro puntos siguientes y a levantar la situación.
Hizo gestos de lloro al público y siguió a lo suyo, hacia un ‘tie break’ en el que es el rey. Ha ganado los últimos trece que ha disputado en Grand Slam, récord de la Era Abierta. Es intocable en estos momentos. Ni siquiera con Sinner 3-1 arriba y saque desfalleció el serbio, que se aprovechó de otro desfallecimiento del italiano. Del posible 4-1 a tres puntos seguidos para Djokovic.
Con este triunfo, Djokovic llega a las nueve finales en Wimbledon, a tres de Federer, lleva 35 en Grand Slam, el que más en la historia entre hombres y mujeres, y peleará por igualar los 24 Grandes de Margaret Court este domingo. Su rival, Carlos Alcaraz o Daniil Medvedev.
Carlos Alcaraz hizo historia este viernes 14 de julio, pues con tan sólo 20 años y 72 días se ha convertido en el cuarto jugador más joven en clasificarse para la final de Wimbledon por detrás de Boris Becker, Björn Borg y Rafael Nadal.
De igual forma es apenas el tercer español que lo consigue después de Manolo Santana (1966) y Rafael Nadal (2006-2008 y 2010-11).
Alcaraz sabía que tenía que subir el nivel ante Daniil Medvedev con respecto a los cuartos con Holger Rune. Y eso es precisamente lo que hizo para cerrar un tanteo de 6-3, 6-3 y 6-3, en 1 hora y 50 minutos. Después de calentar con su hermano Álvaro, el murciano salió enchufado, tocando la pelota más limpia que nunca.
La estadística no miente y había cometido sólo cinco errores no forzados en el set inicial. Medvedev jugó perfecto en todos los juegos menos en uno: el octavo. Se equivocó al saque con una dejada y luego le penalizó su rival con un certero resto de revés.
Carlitos afrontó la primera pelota de ‘break’ en contra en el segundo juego de la continuación y la salvó como si nada. Es lo que tienen los elegidos y lo que los hace diferentes a los demás.