¿Qué cambiará en la ofensiva de los Dallas Cowboys con el regreso de Dak Prescott luego de una fractura en el dedo pulgar de la mano derecha, potencialmente este mismo domingo en oposición a los Detroit Lions?
Nada cambia, pues el modo en que los Cowboys (4-2) jugaron en los 5 partidos con el quarterback Cooper Rush iniciando en vez de Prescott.
Y no lo reemplazaron con un veterano probado o un elevado recluta en el draft, el proyecto era ser una ofensiva principalmente terrestre, y destacar la fortaleza defensiva del equipo.
Todo cambia, ya que Prescott puede hacer muchísimo más que Rush.
Jamás hubo disputa de quarterback y jamás la iba a haber. I
En el sentido de que esperaba que hubiera discusión, giraban alrededor de que el equipo ganara encuentros sin Prescott.
Esto no es el 2016, una vez que Prescott reemplazó a un lesionado Tony Romo. Después de perder en la abertura de la temporada, los Cowboys ganaron 11 encuentros seguidos dicha temporada.
Sólo una vez, no anotaron 24 aspectos a lo largo de dicha racha ganadora.
Bajo Rush, los Cowboys superaron 24 puntos de vista únicamente una vez, anotando 25 en oposición a los Washington Commanders.
Aunque los Cowboys no se sintieron atados ofensivamente con Rush como su quarterback, la destreza y vivencia de Prescott abre más grandes modalidades. Sin embargo, los Cowboys no anhelan que Prescott sienta que regresa como el héroe conquistador, necesitando realizarlo todo para que el equipo tenga triunfo.
Los Cowboys han disfrutado de un ángulo complementario, inclusive una vez que arrojó para 4,900 yardas en el 2019 e impuso una marca de la franquicia con 37 pases de touchdown la temporada pasada.
Prescott mencionó la semana pasada tras el fracaso frente a los Philadelphia Eagles, que su proyecto era jugar ante los Lions. Hablando para 105.3 The Fan en Dallas el martes, Jones sostuvo, «Luce listo para jugar». Fue dado de alta, médicamente.
El América, con este resultado, siete victorias al hilo y ocho sin conocer la derrota.