La magnitud del movimiento sísmico de este lunes ha sido de 7,7, según informó el Servicio Sismológico Nacional mexicano.
El epicentro estuvo ubicado 59 kilómetros al sur de Coalcomán, en el estado de Michoacán, y a 10 km de hondura.
Mientras tanto que otro perdió la vida por el desplome del techo del gimnasio en el cual estaba.
El centro de monitoreo de tsunamis estadounidense avisó de un viable tsunami en las costas del Pacífico de México, si bien la alerta ha sido desactivada horas luego.
Informó antes sobre un «levantamiento en el grado del océano» registrado en Manzanillo con una amplitud máxima registrada de 124 cm.
El terremoto de este lunes se registró justamente en el aniversario de ambos gigantes terremotos que golpearon el territorio con fuerza en 1985 y 2017 y que dejaron centenares de muertos.
Parientes de las 26 víctimas (entre ellos, 19 niños) que fallecieron en la escuela Rébsamen de la Ciudad de México hace 5 años, por cierto, se encontraban guardando un minuto de silencio por la tragedia una vez que fueron sorprendidos por este nuevo temblor.
Además, dentro de este aniversario, y menos de una hora previamente del temblor de este lunes, México hizo el simulacro nacional de sismos para que la población estuviera preparada.
Esto causó cierta incertidumbre y confusión entre varios habitantes, que dudaban si la segunda alerta se debía a un terremoto real o era parte del simulacro.
Y hasta las 7:00 de la mañana de este martes, el Servicio Sismológico mexicano ha registrado casi 700 réplicas del temblor.
Con epicentro al sur de Tecomán en Colima, estado vecino a Michoacán. Las dos entidades registraron la más grande magnitud del temblor primordial y los más grandes perjuicios en inmuebles e infraestructuras.
En Manzanillo, Colima, se desplomó el techo de un gimnasio en un supermercado que produjo el deceso de una persona.
Además, hubo desprendimientos terrestres en la carretera hacia la Urbe más importante del estado y se reportaron grietas en la presa de almacenamiento Las Trojes.