Desde diferentes vertientes se habla de la necesidad de ver a la persona como un ser integral, una consideración que implica reconocer cuatro partes del Ser, por ello la sanación energética opera en diversos niveles:
El cuerpo físico es sostenido por un sistema energético, compuesto por los chakras (centros energéticos), los nadis (canales energéticos) y los cuerpos energéticos interrelacionados entre sí:
Cada uno de estos cuerpos tienen su propia vibración, que va de menor a mayor, de acuerdo a su proximidad con el cuerpo físico.
Actúa de una forma práctica y muy eficaz, acompañando a las personas a evolucionar a nivel físico, psicológico, espiritual y material. Cabe destacar que, la Sanación utiliza energía divina más la energía vital presente en el entorno, también conocida como prana para ayudar a las personas a equilibrar y fortalecer su campo energético y por consecuente todas las áreas de su vida.